Jaideep Sing era fiel sij y ahora es sacerdote católico

* «No comprendía como la gente podía rezar a un Dios que muere en la cruz»
* «Me convertí en secreto. Durante tres o cuatro años lo oculté a mi familia. No quería hacerles sufrir más»
26 de enero de 2010.- Jaideep Singh había sido formado en la espiritualidad sij por su madre, una mujer piadosa. Luego formó parte del coro del colegio católico en el que estudiaba. A los 13 años entró por primera vez en una iglesia. Los interrogantes sobre ese Dios humillado en la cruz surgieron a borbotones. Se convirtió a escondidas y se bautizó. Ahora es sacerdote y misionero. Del Estado del Punjab arranca la historia de Jaideep Singh, nacido en 1981 en una relevante familia sij. Hoy se llama fray Stephen James y es miembro del Maryknoll Missionary Institute. «Mi madre era una mujer muy piadosa», relata, «y me introdujo en las enseñanzas del Gurú Granth Sabih. Así que nos educamos en casa, y aprendimos a rezar y recitar los himnos de los sagrados textos», dice refiriéndose al sijismo. «Mi padre me acompañaba al “Gurdwara” (un templo sij) y poco a poco crecí en la fe del Todopoderoso».
(Kevin de Souza / Palabra) Jaideep se matriculó en un centro católico (como es frecuente en este país), el colegio de Saint Stephen, en Chandigarh, capital de Punjab. Harold Carver, decano y fundador del centro educativo, lo recuerda como un excelente deportista que también «cantaba en el coro». Por su buena voz le invitaron a actuar en la Vigilia Pascual de una pequeña iglesia, la de san Sebastián. Tenía 13 años y era la primera vez que entraba en una iglesia católica. «Tengo vívidos recuerdos del crucifijo colgado en la pared y toda la gente de rodillas rezando. No comprendía cómo la gente pordía rezar a un dios débil, que moría en una cruz, Para mí, de Dios tenía que emanar la fuerza y el poder». La liturgia le produjo un gran asombro, igual que la oración en común. Se abrió ante su mente «un camino totalmente nuevo para mí».
