A Rosa María, 35 años, su madre la llevó de niña a sesiones de Umbanda y Kimbanda, se le pegó un demonio, volvió a la Iglesia Católica y la Pastoral del exorcismo la liberó

* «Este ser se me impregnó. No podría realizar mi vida en plenitud, me veía ahorcada, muerta, me daban ganas de suicidarme, no estaba a … Sigue leyendo A Rosa María, 35 años, su madre la llevó de niña a sesiones de Umbanda y Kimbanda, se le pegó un demonio, volvió a la Iglesia Católica y la Pastoral del exorcismo la liberó