Busca el pesebre del Niño Jesús en cada persona / Por Conchi Vaquero y Arturo López

Navidad es el milagro de amor de un Dios que es infinito y se hace niño indefenso.

La fotografía de la derecha es del belén de la Parroquia de la Inmaculada Concepción de Vilanova i la Geltrú, Catalunya, España

28 de diciembre de 2011.-Hazte como un niño y podrás acoger el Reino de Dios que viene a entregarte Jesús, el Salvador, el Mesías. Dios está contigo desde siempre en la medida que le vas abriendo todo tu ser. Celebramos el nacimiento del Verbo Encarnado que vive para siempre con nosotros. Cada día que pases percibiendo que el Señor vive en ti podrás cumplir la voluntad de dar su Amor a los otros. Ten la ilusión de un niño. Dios mismo se goza de la creación única que realizó en ti de tal manera que desea verte lleno de la luminosidad del Niño Jesús a cada instante. Dios se hizo niño para que tú te convirtieras en un bebé en manos de su Padre. Déjate cuidar por Dios. Él quiere que crezcas dentro de sus inmensas entrañas de misericordia.

     Navidad es el encuentro entre lo inmenso y lo pequeño,

entre el omnipotente y la debilidad.

El Padre del Cielo quiere que seas regalo para quienes encuentres en tu camino. Tus debilidades son transformadas por su Amor. Abandonalas a los pies del Niño Jesús para siempre. Dios quiere darte a ti para que las regales a los demás actitudes perdurables:

A los enemigos, el perdón.
A los oponentes, la tolerancia.
A los amigos, el corazón.
Al prójimo, el amor.
A los niños, el buen ejemplo.
A ti mismo, el respeto.
A Dios, tu vida entera.

Navidad es creer en la vida, porque Dios ha apostado por ella.

Dar vida y vida en abundancia. Pide la gracia de comprender que la vida perdurable y que da fruto sólo se encuentra en Dios. Levanta los brazos y abre tus manos y el corazón para ser fuente del río de agua viva que el Padre quiere entregarte con el nacimiento de Jesús.

Navidad es acoger al Dios que nace y cuidarle en
los más pobres.

Los más pobres son aquellos que no tienen conciencia de pecado y no pueden acudir al único médico que tiene la medicina de Amor que puede curarlos.

Los más pobres son los que se dañan a si mismos pretendiendo responsabilizar a los demás de las consecuencias de sus propios actos.

Los más pobres son aquellos que no se aceptan como son y aunque tengan todo lo material se sienten perdidos y deprimidos.

Los más pobres son los que habiendo tenido oportunidades para levantarse han decidido seguir dentro del pozo en el que han caído.

Jesús ha venido para ellos. Dios tiene sólo tu corazón, tus manos, tus ojos, tu ser para mostrarse en ti a los más pobres. Piensa por un momento que el Niño Jesús te está pidiendo que le tomes en tus brazos y lo lleves a los más pobres. El Señor te lo pide a ti. Lo que tú no hagas quizás nadie lo realice. Dios quiere que des a los demás toda tu vida. Tú sólo puedes decidir entregarte e ir hacia los demás. Nadie puede hacerlo por ti.

Navidad es ver, oír y tocar al Dios eterno que se
hace carne, que quiere llamarse Emmanuel (Dios con nosotros).

El Niño Jesús habita en aquellos que se creen torpes, tristes y desdichados. También lo encontraremos en los que tienen adicciones, en los pobres , en los enfermos, en los poco cultos.

Busca el pesebre del Niño Jesús en cada persona y muéstrale el rostro de Dios que habita en ella para que perciba que también es bendecida.

Navidad es alegrarse y asociarse a aquel cantar:
«Gloria a Dios en el cielo y en la tierra paz a los hombres de buena voluntad, a los que ama el SEÑOR».

Pide la gracia de no cansarte de Amar nunca en nombre de Jesús el Señor y que su misericordia te acompañe siempre. Ven!! Vamos a adorarlo!! Calla y mira!! Asómbrate de la grandeza de la pequeñez hecha luz en medio de la noche. La oscuridad y las noches han pasado. Nunca más existirá la noche en tu vida si guardas en tu interior el resplandor del Hijo de Dios. Que la paz permanezca para siempre en tu ser !!!