Fernando Baena tuvo un accidente y se quedó tetrapléjico, acudió a psiquiatras, medicación, drogas, meditación… Su vida cambió cuando clamó: «¡Dios, si tú existes, ayúdame!»

*  «Cuando ya no había nada a que recurrir, y me di cuenta de que no podía hacer nada y dije, me doy por vencido, … Sigue leyendo Fernando Baena tuvo un accidente y se quedó tetrapléjico, acudió a psiquiatras, medicación, drogas, meditación… Su vida cambió cuando clamó: «¡Dios, si tú existes, ayúdame!»