Regina y Erik esperaban una hija con espina bífida y Trisomía 18, deciden no abortar y solo vive una hora: «Dios no hace diferencia entre una vida larga y una breve»
Camino Católico.- Regina y Erik tienen ya 8 hijos y están a la espera de la novena. En casa, el clima es de emoción. Pero no todo va como debería. El control del cuarto mes de embarazo deja pocas dudas: la niña padece espina bífida y Trisomía 18. Para Regina y Erik no existen alternativas a la vida, como quiera que venga. No quieren abortar pese a que les dicen que su hija vivirá poco tiempo. Comparten su testimonio de vida y de fe en Dios en el video de Aleteia.
Buscan el lugar en el que acojan a la bebé lo mejor posible y se topan con el Neonatal Comfort Care Program de Nueva York. “Desde ese momento todo cambió. Estábamos en paz, a pesar de saber todos los problemas, porque sabíamos que sería acogida, cuidada y amada”.
Caeli nace el 18 de junio de 2014 y vive menos de una hora, pero está rodeada por el afecto de sus padres y hermanos. “Cantamos y cada uno pudo sostenerla en brazos. Fue un momento de alguna forma gozoso”.
A Caeli le bastaron menos de 60 minutos para dejar para siempre una huella en la vida de su familia y de quien participó en su nacimiento y en su funeral. “Dios no hace diferencia entre una vida larga y una breve. La vida de Caeli fue muy breve, pero fue una vida completa”.