Oración mariana del Papa Francisco con el clero diocesano en Marsella, 22-9-2023

2 de septiembre de 2023.- (Camino Católico)  Es en la basílica «Notre-Dame de la Garde» que se desarrolla el primer momento de la visita del Papa Francisco a la ciudad francesa con ocasión de la clausura, mañana, de la iniciativa «Rencontres Méditerranéennes». En el santuario mariano habla al clero de la arquidiócesis. «Llevemos a los hermanos la mirada de Dios, llevemos a Dios la sed de los hermanos – recomienda – difundamos la alegría del Evangelio”, dice en su alocución. En el vídeo de Vatican News se visualiza y escucha toda la celebración.

El Papa entra en la basílica en silla de ruedas, bendice a los presentes con el agua bendita símbolo del bautismo, luego llega al altar central detrás del cual se encuentra la estatua de Nuestra Señora de la Guardia a la que está dedicado el santuario. Dos religiosas sostienen una gran vela, regalo del Papa a María. Después de encenderla,  símbolo de la luz de Cristo, Francisco se recoge en un momento de oración silenciosa ante la estatua. Al final es el arzobispo cardenal Jean-Marc Aveline quien dirige un saludo al Papa. Sigue la lectura de un pasaje tomado del libro de Sofonías.

Foto: Vatican Media 22-9-2023

Al final de las palabras del Papa, todos los presentes rezan una oración a María, venerada en este santuario:

Foto: Vatican Media 22-9-2023

“Virgen María, me dirijo a Ti en oración, A Ti, que te llamamos Nuestra Señora de la Guardia. Me presentas a tu Hijo. Él me dice: «He aquí a tu madre.» Soy y quiero seguir siendo Tu hijo. Protege la salud de mi alma y mi cuerpo como la de todos mis seres queridos. Ayúdanos a ser fieles a la fe de nuestro bautismo y respetuosos de todo lo que tu Hijo nos pide. Concédenos amar a todos aquellos que nos rodean. Que nuestro amor pueda irradiar bondad, comprensión e indulgencia. Ayúdanos a servir cada vez mejor a nuestros hermanos. Apóyanos en las pruebas. Protege a todos los que sufren en cuerpo y alma. O Virgen de la Guardia, o Madre mía del cielo, Me dirijo a ti con corazón de niño. Ruega por nosotros a Tu Hijo Jesús. Obtén para nosotros la gracia de amarlo cada vez más y parecernos más a Él cada día.”

Papa Francisco al clero en Marsella: «Llevar a los hermanos la mirada de Jesús y a Jesús la mirada de los hermanos siendo instrumentos de misericordia e intercesión»  


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