Oración al Ángel de la Guarda para que presente ante Dios Padre nuestra vida, oraciones y necesidades / Por P. Carlos García Malo
* «Santo Ángel de la guarda, compañero fiel e invisible en mi camino. Dios te puso junto a mí desde el principio en mi peregrinación terrenal para que juntos acometamos la valiente tarea de la vida. Ser espiritual que puedes ver el rostro de Dios y presentarle mi persona a cada instante, muéstrale mis necesidades y también las oraciones para que llevadas ante el altar del cielo por tus manos, sean bendecidas y respondidas con el amor y la generosidad de un Padre Dios lleno de ternura y compasión. Que no me separe de ti, que tenga tu nombre todos los días en mis labios, que seamos buenos amigos y cómplices a la voluntad de Dios»
P. Carlos García Malo / Camino Católico.- “Todo fiel tiene junto a sí un ángel como tutor y pastor, para llevarlo a la vida”, decía San Basilio al referirse al ángel custodio, aquel que Dios pone a cada uno desde la concepción y cuya fiesta se celebra cada 2 de octubre.
La palabra “ángel” proviene del griego y significa “Mensajero”. Estos espíritus celestiales son citados por ejemplo en el Salmo 90: «A sus ángeles ha dado órdenes Dios para que te guarden en tus caminos».
Jesús también los menciona en su famosa frase en el evangelio que hoy se proclama en la Misa (Mt. 18,10): «Cuídense de despreciar a cualquiera de estos pequeños, porque les aseguro que sus Ángeles en el cielo están constantemente en presencia de mi Padre celestial».
La Iglesia celebra la fiesta de los ángeles custodios desde el Siglo XVII. Fue instituida por el Papa Clemente X.
Pidamos a nuestro Ángel de la Guarda que presente ante Dios Padre nuestra vida, oraciones y necesidades:
Santo Ángel de la guarda,
compañero fiel e invisible en mi camino.
Dios te puso junto a mí desde el principio en mi peregrinación terrenal
para que juntos acometamos la valiente tarea de la vida.
Ser espiritual que puedes ver el rostro de Dios
y presentarle mi persona a cada instante,
muéstrale mis necesidades y también las oraciones
para que llevadas ante el altar del cielo por tus manos,
sean bendecidas y respondidas con el amor y la generosidad de un Padre Dios
lleno de ternura y compasión.
Que al igual que Cristo fue consolado por los ángeles en Getsemaní,
así en las pruebas y contrariedades
sea yo confortado y animado por ti.
Que el Espíritu Santo te ilumine
para que, siguiendo cuanto te mande,
sea yo guardado en mi camino.
Que no me separe de ti,
que tenga tu nombre todos los días en mis labios,
que seamos buenos amigos y cómplices a la voluntad de Dios.
Y que un día podamos gozarnos juntos en la eternidad
ante el que nos creó con amor inefable,
junto a María siempre Virgen y Reina de los Ángeles por lo siglos de los siglos.
Amén.
Santo Ángel de la guarda, cuida y ruega por mí en todo momento.
Carlos García Malo
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