Segundo día (2): “Eres precioso a mis ojos y yo te amo“

Descender para encontrar a Jesús

            En su carta a los Filipenses, San Pablo escribe : " Si hay una exhortación en nombre de Cristo, un estímulo de amor, una comunión en el Espíritu, una entrañable misericordia…"

            Resulta evidente el cariño de Pablo por las gentes de Filipo. Fue la primera ciudad de Europa que evangelizó, y estaba muy unido a ellos, en particular a Lidia, que fue la primera que le acogió, y a los filipenses, que siempre la habían apoyado mucho. Había una relación muy profunda entre san Pablo y los filipenses, y se dirige a ellos suplicándoles que permanezcan unidos : "colmad mi alegría, teniendo un mismo sentir, un mismo amor, un mismo ánimo, y buscando todos lo mismo. Nada hagáis por ambición ni `por vanagloria, sino con humildad, considerando a los demás como superiores a uno mismo, sin buscar el propio interés, sino el de los demás". (Flp 2, 1-4)

            Es verdaderamente el grito de un padre, del padre de la comunidad, que sabe que ésta vive de la unidad y muere si hay división. Al corazón de Pablo, como al corazón de Jesús, le apasiona la unidad.

            Luego continua con esta frase asombrosa, que nos enseña como ser fuente de unidad : " tened entre vosotros los mismos sentimientos que Cristo ". Es una frase muy importante, que nos hace tocar el corazón del Evangelio : para ser agente de unidad, es necesario tener los mismos sentimientos que Jesús.

            Y, justo después, Pablo describe estos sentimientos : "El cual, siendo de condición divina, no codició el ser igual a Dios, sino que se despojó de si mismo, tomando condición de esclavo. Asumiendo semejanza humana.."

            Jesús no quiso conservar la gloria que poseía en tanto Dios, sino que aceptó anonadarse, aceptó vaciarse, "despojarse" para hacerse ser humano, para que se le viera, se le oyera, se le tocara, como a un ser humano , semejante a nosotros, como un hermano en humanidad.

            "Apareciendo en su porte como hombre, se rebajó a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y una muerte de cruz " . (Flp 2, 6-8). Pablo nos describe el modo de ser de Dios. Y el modo de ser de Dios no consiste en proclamarse el más fuerte, el más grande o el más sabio, ni en desear el poder o la gloria, sino en rebajarse, hacerse mas pequeño, convertirse en ser humano y bajar aún más, haciéndose esclavo y, más todavía, un esclavo rechazado.

            Allí, en lo más bajo de la escala, se encontrará con los más rechazados, los más pobres, los más pequeños, para crear con ellos una Comunidad. Con ellos, y partiendo de ellos, recompone el cuerpo de la humanidad desgarrado por la ambición y el ansia de poder y éxito.

            Sí, la visión de dios consiste en descender, humillarse, bajar lo más posible, encontrarse con los más pobres, con los más pequeños y ascender con ellos para construir esa nueva humanidad que no deja nadie atrás, ni olvida ni rechaza a nadie.

            La visión de los hombres consiste siempre en querer ascender por la escala lo más alto posible, vencer en la carrera, obtener fuerza, poder, riqueza, dominar, conquistar gloria y renombre humanos.

            El secreto de Jesús consiste en encontrar en la humildad y la pequeñez, a los más pequeños, para crear con ellos comunidades de esperanza, comunidades del Reino.

            Este misterio de Dios se manifestó de un modo muy particular cuando Jesús lavó los pies de los apóstoles ( Jn 13 ). En el lavatorio de los pies, el primer gesto de Jesús fue despojarse de sus ropas, es decir, adoptar el atuendo de los esclavos, y después lavarles los pies, gesto de esclavo.

            Conocéis cual fue la reacción d Pedro ; se escandalizó, era demasiado, no lo entendía. Y gritó : " ¡ no me lavarás los pies jamás !". Y ya sabéis cual fue la respuesta de Jesús : " si no te lavo los pies, dejas de ser amigo mío, no puedes sino marcharte, no has entendido en absoluto lo que soy, ya no hay nada entre nosotros, todo ha terminado". Es extremadamente fuerte, y el momento es dramático.

            Pedro estaba completamente confuso; no entendía nada, pero sí tenía claro que quería conservar la amistad de Jesús. Entonces, dispuesto a todo le dijo : "no solo los pies, sino hasta las manos y la cabeza".

            Cuando Jesús hubo lavado los pies a los discípulos, se vistió de nuevo y dijo : "Vosotros me llamáis  "Maestro" y " el Señor", y decís bien porque lo soy. Pues si yo, el Señor y el Maestro, os he lavado los pies, vosotros también debéis lavaros los pies unos a otros…".

            Así nos enseña el camino : camino de los discípulos, camino de la humildad, el camino descendiente de la pequeñez y del servicio, el camino de la no-violencia.

            Y en otro lugar nos dice : "Cuando alguien te invite, no te pongas en el primer puesto… vete a sentarte en el último ". (Lc 14, 8-10. No busques la compañía de los poderosos, sino baja por la escala para encontrarte con los más pobres, y no fundamentalmente para hacer algo por ellos ni por el orgullo de hacer algo bueno, sino simplemente para encontrarte con ellos y entrar en comunión y amistad con ellos.

            Este es el secreto; si te haces amigo del pobre, serás bendecido por Dios. Descubrirás algo enteramente nuevo, descubrirás que el Evangelio es verdaderamente una buena nueva, una solución a las plagas de la humanidad, una respuesta capaz de acabar con esta historia de guerra y violencia entre los hombres, esta lucha fraticida en la que Caín mata a Abel, en la que cada cual se esfuerza por mantener a su hermano en la parte baja de la escala para sentirse superior, encastillado en el miedo a ser desalojado por alguien más fuerte.

            Por lo tanto, Jesús nos dice : "deja de tener miedo; deja de protegerte, de defenderte, justificarte y encerarte en el reducido círculo de quienes somos como tú. Acepta las diferencias : debemos vivir cada uno en nuestro lugar, pero unidos. Desciende por la escala para hacerte amigo del pobre y amigo de Dios".

            En nuestra comunidad de Bouaké hay una niña pequeñita muy importante que me ha proporcionado mucha alegría. Se llama Inocente. Siendo bebé, fue abandonada en la selva, y pudo haber sido devorada por una fiera o mordida por una serpiente, pero alguien pasó por allí, la recogió y la llevó a un orfanato. Estaba moribunda, muy delgada y deshidratada. Sin embargo, sobrevivió, y el orfanato nos la confió. Es verdad que es pequeñísima; no andará ni tampoco aprenderá a hablar, no se sabe lo que piensa ni lo que entiende, pero cuando alguien se acerca a ella y la llama por su nombre, su rostro reluce como una estrella, su sonrisa la ilumina y sus ojos brillan, es de una belleza excepcional.

            Un día, al mirarla me dije que era idéntica a Jesús. Inocente ni juzga ni condena a nadie; es demasiado pequeña para juzgar, pero si alguien no se detiene a mirarla y tocarla, se siente herida, como Jesús. Jesús no condena nunca, pero se siente herido si no nos acercamos a Él. Es el misterio de Dios.

            Uno de los papeles que desempeño en la comunidad consiste en acompañar a los asistentes. Con ellos aprendo mucho. Cuando se pasa el día escuchando, se aprende mucho, incluso más que los libros. Los libros pueden ser interesantes, pero lo que dice el libre de los corazones es aún más interesante, porque es el lugar donde habita Dios. Es también el lugar de los combates, y se aprende mucho cuando se está cerca de este lugar.

            A los asistentes que acompaño suelo hacerles la siguiente pregunta : "¿tú oras?". Al decir esto, no quiero decir : "¿recitas oraciones?", sino "¿pasas tiempo con Dios?" ; "¿estás en comunión con Dios?"; "¿ eres feliz con El ?". Suelo escuchar como respuesta : " no tengo tiempo ".

            Es verdad que uno de los peligros de El Arca como de tantos otros lugares, es estar demasiado ocupado, ¡ hay tanto que hacer !. En mi hogar, donde las personas que tienen una discapacidad son ya bastante mayores, se ponen enfermas frecuentemente, y los problemas médicos pueden ocupar todo nuestro tiempo. Además, los que antes podían vestirse solos, ahora ya no pueden hacerlo, los que se lavaban solos, ahora necesitan ayuda. Es verdad que estamos ahora más ocupados.

            Yo respondo : "lo comprendo…, pero la semana pasada tuviste unos días de descanso, supongo que dedicaste mucho tiempo a orar". Entonces suele notarse una especie de malestar y,  si la persona es sincera, termina diciendo "¡No!". "entonces el problema no es de tiempo, sino de otro tipo. "Es que no quieres orar, y ¿sabes porqué?.

            Es muy frecuente que la respuesta sea : "tengo miedo de acercarme a Dios; tengo miedo que me pida algo que yo no quiera o no pueda hacer". ¡ Como si Dios estuviera ahí constantemente para obligarnos ha hacer cosas que no queremos..!.En nosotros, unida a nuestra culpabilidad fundamental, está siempre la extraña idea de un Dios que castiga y condena, que quiere quitarnos lo que amamos y las cosas que apreciamos, un Dios terrible que exige sacrificios. Pero, ¡ ése no es Dios !.

           Dios es aquel que ama, un Dios misericordioso que nunca se siente decepcionado y que sabe bien de que estamos hechos. Sabe que en nosotros hay este foco de culpabilidad, ese miedo permanente a no ser amados, esa vulnerabilidad fundamental, y nos ama. Únicamente quiere revelarnos que nos ama, co o le dice a Pierre.

            Pierre forma parte de una de nuestras comunidades, tiene el síndrome de Down. Un día uno de los asistentes le preguntó si le gustaba rezar, "Si", dijo Pierre; el asistente añadió: " Y ¿qué haces cuando rezas?". Escucho, respondió Pierre. Y ¿qué te dice? prosiguió el asistente. Me dice : "Tú eres mi hijo amado".

            Esto es lo que descubrimos en la oración: que todos somos el hijo o hija amados de Dios, que Dios quiere unirse a nosotros para revelarnos sus secretos. El secreto de Inocente, el secreto de Luisito, nuestro propio secreto, porque dios nos ama como a hijos suyos. También nosotros estamos heridos, tenemos discapacidades, menos visibles quizás que la de Inocente o Claudia, pero muy reales, y Dios también está vivo en nosotros.

            Esta es una de las cosas que he comprendido bañando a Eric. Eric era muy pobre : ciego, sordo, no podía ni hablar ni comer solo, y cuando dejé de ser responsable de la comunidad de Trosly, me fui a vivir con él. Me ocupaba de él, casi todos los días le bañaba, le daba de comer, le hacia compañía, y me proporcionaba mucha alegría.

            Tocando su cuerpo, ese cuerpo tan pobre, tan pequeño, comprendí que era verdaderamente templo de Dios, y eso es lo que dicen estas palabras de San Pablo : "¿ no sabéis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo ?" ( 1 Co 6, 19 ).

            Es extraordinario comprender que nuestro cuerpo es lugar en el que reside Dios, el lugar en el que establece su morada. Es verdad que, cuando comemos el cuerpo de Jesús, nos transformamos en tabernáculo; también es así cuando le amamos y guardamos su Palabra. " Si alguno me ama, guardará mi Palabra, y vendremos a él, y haremos morada en él" ( Jn 14, 23 ).

            Jesús nos lo revela, la Iglesia nos lo revela : nuestro cuerpo, este pequeño cuerpo de Eric, es Templo de Dios. Las cosas cambian cuando descubro que Dios me ama, que mi cuerpo es templo de Dios, que soy un tabernáculo y que Dios habita en mí.

            Por eso hacemos este retiro, para conocer a Yahvé y sus secretos. Por tanto, volvámonos a Él, tomemos conciencia de su presencia en nosotros, entremos en un corazón a corazón con Él. Lo importante en un retiro, como dije al comienzo, no son mis palabras, sino las Palabras del Espíritu que habita en nuestros corazones.

            Es a Él a quien debemos escuchar. Yo oro para que mis palabras no sean un obstáculo a Sus Palabras, sino que simplemente os ayuden a entender mejor lo que os dice vuestro propio corazón.

            Quizá lo único que Jesús quiera decirnos hoy es que confiemos en nuestro corazón. Por eso, os animo a que pasemos algún tiempo en la capilla, en la habitación o en el exterior, simplemente escuchando a Dios.

            Que Él os guíe, que nos hagamos hombres y mujeres amando a Dios.

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